El clericot es excelente en las tardes calurosas en las que se antoja algo refrescante y muy rico. Va muy bien para acompañar una comida o simplemente para disfrutar sin prisas.
Esta bebida se prepara con vino tinto, frutas frescas y un toque de refresco que le aporte efervescencia. Suele tomarse como aperitivo pero la realidad es que marida bien con verduras, algunas pastas y pescados.
Hay que tener cuidado de no diluirlo demasiado y de usar un vino adecuado, que sea frutal pero no muy caro porque se va a mezclar.
Nuestra recomendación siempre será optar por etiquetas jóvenes (las reconoces cuando no especifican el año de cosecha) y con uvas como la Cavernet Sauvignon, Syrah o Pinot Noir.
A continuación te compartimos una receta facilísima y deliciosa para esos días de mucho calor. ¿Tienes otras frutas en casa y las quieres aprovechar? ¡Adelante! Nos encantan las uvas y el durazno para darle un toque más especial.
Para el refresco, la recomendación es que sea de manzana para que aporte dulzor pero también funciona a la perfección el de limón o, si quieres agregarle un toque más de alcohol, un hard seltzer.
¡Que lo disfrutes!