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#CuriosaDeBaco La Cabernet Sauvignon, la monarca del vino

Por Mayra Zepeda

Son vinos de color rojo intenso, con aromas a moras, ciruelas, matices violáceos; vinos con cuerpo y con un característico sabor herbáceo. Podría decirse que en la corte de las variedades, la uva Cabernet Sauvignon es indiscutiblemente la reina.

Así es, Cabernet Sauvignon no solamente es la variedad de uva más plantada del mundo -en casi 50 países-, sino también es fuerza impulsora detrás de algunas de las regiones vinícolas más potentes en el planeta como lo son Burdeos en Francia y más recientemente el valle de Napa, el corazón de la producción vitivinícola americana.

Un dato adicional para adentrarnos a conocer más de esta varietal, de acuerdo con recientes datos de Vivino, el 11.1% de todos los vinos del mundo contiene algo de Cabernet Sauvignon.

Los orígenes de esta uva se remontan a la zona de Burdeos en el siglo XVII y de acuerdo a estudios genéticos relativamente recientes, es producto de una mezcla entre Sauvignon Blanc y Cabernet Franc. Honestamente, no pudo haber tenido mejor familia.

El Cabernet Sauvignon comienza a crecer internacionalmente como resultado de una arrolladora presencia en el vino francés de Burdeos, y desde ahí, la uva viaja a otros países de Europa y después cruza el océano hacia América, donde se adapta y se siente en casa desde Estados Unidos hasta la Patagonia.

Es una varietal popular no solo al paladar, sino porque es una uva versátil que se adapta a todo tipo de clima. Los granos de la variedad Cabernet Sauvignon son de tamaño pequeño, la piel es gruesa y las semillas son fuertes en taninos. La cepa Cabernet Sauvignon tiene la propiedad de aclimatarse con extrema facilidad en las principales regiones vitivinícolas de todo el mundo.

Muy vigorosa y relativamente fácil de cultivar, aunque la cosecha es tardía. Es una de las variedades Vitis vinifera más resistentes al frío y a las enfermedades. Su brotación (o rompimiento de las yemas) es tardío, por lo que es menos susceptible a los daños causados por las heladas. Las vides de esta variedad, adecuadamente manejadas, producen altos rendimientos y frutas más resistentes a las pudriciones. Algunos clones están disponibles. Sus debilidades incluyen la susceptibilidad a las enfermedades de invierno y de la corona, y el excesivo crecimiento vegetativo.

El vino Cabernet Sauvignon es conocido por su color oscuro, un cuerpo robusto y un contenido de alcohol de más de un 13% en promedio, particularmente provenientes de lugares como California, Australia y Chile. El vino es seco y recuerda a sabores de pimiento verde, tabaco, cassis y frutas oscuras como las cerezas, junto con un toque de vainilla que proviene de la crianza de vinos en barricas de roble.

Hay que beber Cabernet Sauvignon de diversas regiones y escoger el gusto propio, la uva reina en el mundo, aquella que da origen a vinos hechizantes, sublimes, característicos de una monarca.