Dicen que la lectura alimenta al espíritu. Es por ello que la diseñadora Maria Mordvintseva-Keeler tomó los ingredientes principales de tres emblemáticas novelas y los colocó de la misma manera en la que son etiquetados los alimentos, con porcentajes diarios recomendados y cada ingrediente bien detallado.

Así, rompiendo con el dicho de que no se puede juzgar un libro por su portada, Mordvintseva rediseñó la cubierta de tres grandes de la literatura, uno para el desayuno, otro para el almuerzo y uno más para la cena. Desayuno con diamantes de Truman Capote, El almuerzo al desnudo de William Burroughs y Cena en el restaurante de la nostalgia de Anne Tyler, fueron trasladados a un formato único, las icónicas latas de sopa de la marca  Heinz.

Cada una de las etiquetas está ilustrada con información especial de cada libro. La calidad de los personajes, el recuento de páginas —que corresponde al tamaño de la porción—, los valores nutricionales diarios de humor e ironía y el año de su creación. Se trata de una verdadera obra de arte que combina dos grandes pasiones, la literatura y la gastronomía.

A continuación te dejamos las imágenes para que admires este gran logro del diseño, el cual fue titulado “Food for Thought”. Si quieres conocer un poco más de su trabajo da click aquí.