Los grupos de presión del sur de los Estados Unidos cabildearon hace ocho años la prohibición de la producción y venta del hígado de ave engordada “de manera inhumana”, argumentan algunos, natural, dicen otros. Es decir, prohibieron las granjas y venta de foie gras.
California sigue de luto. La prohibición de la venta de foie gras en Estados Unidos a partir de este año ha dejado inconformes a muchos, dudosos de lo verdaderamente inteligente de la iniciativa a otros y, sobretodo, un enorme aire de tristeza.
Independientemente de las ideologías, lo que sea de cada que el foie gras ofrece una textura elegantísima y sedosa, miles de posibilidades de combinación con otros ingredientes y sobretodo un sabor inolvidable.
El gran viajero y crítico gastronómico Anthony Bourdain dice con toda la razón que el foie gras es uno de los 10 más importantes sabores en la gastronomía.
Nunca pensé que vería el día en que pudieses fumar marihuana y no comer foie gras en California
“Nunca pensé que vería el día en que pudieses fumar marihuana y no comer foie gras en California”, relató a la cadena televisiva CNBC.
Las versiones de los expertos son encontradas. Mientras unos aseguran que el órgano de los patos sufre alteraciones graves, otros dicen que por tratarse de aves migratorias que requieren guardar energía para sus viajes, su hígado está especialmente diseñado para crecer y retener comida y energía en grandes cantidades.
Efectivamente hay que alimentar de más a los gansos, patos u ocas para obtener hígados grasos pero, acá entre nos, ¿no es así como se está alimentando a las reses o los pollos que se venden de forma industrial?
Este sensible tema es un buen ejemplo de la diferencia de culturas entre países. Francia obliga legalmente a los productores de hígado graso de aves a pasar por el proceso llamado gavage, es decir alimentación forzada y excesiva del animal, para poder denominar a su foie gras mientras en California se prohíbe.
Los medios le han llamado el foiegeddon. Nos quedamos con dudas de todas las versiones, por un lado la de los grupos aferrados defensores de los animales que, sus razones tendrán, pero también profundizando en la opinión de otros conocedores que sin dudar afirman: “nosotros no inventamos el foie gras, las aves lo hicieron para poder volar cruzando el Mediterráneo”.