La experiencia con los sentidos comienza al entrar a la tienda. Todo el lugar es blanco, el espacio perfectamente montado; claramente se busca no robar cámara a los protagonistas del lugar y resaltar el color de los parisinos macarons.
La temperatura del aire acondicionado, sin importar la época del año, siempre te recibe agradable. Son muy cuidadosos con la música, crean ‘playlists’ pensando en los clientes y sus productos para crear una atmósfera capaz de agasajar a los sentidos el gusto, oído y olfato.
“Cuidamos todos los detalles para que al último venga la mordida al macaron”
“Cuidamos todos los detalles para que al último venga la mordida al macaron”, nos cuenta Denise Theurel, fundadora de la Boutique Theurel & Thomas, una repostería francesa con sedes en Monterrey, Querétaro y próximamente el DF, enfocada principalmente a la producción y venta de macarons, este estético y exclusivo postre francés que, en su forma más pura, es una confección de harina de almendra y azúcar con un relleno al centro de sabores varios.
“Somos una boutique de macarons en México, un postre de origen francés pero elaborado con manos y talento 100 por ciento mexicano”, nos cuenta Denise quien hoy apuesta por el crecimiento de su proyecto con un centro de distribución para todos los estados y que asegura que la participación de los ingredientes mexicanos es una verdadera aportación; macaron de frambuesa, de mandarina, de manzana con canela o lavanda, pero también de camote, de chocolate y mezcal, de guayaba y chipotle, hasta de chocolate Abuelita.
El origen de los deliciosos macarons es incierto. Como muchas otras creaciones culinarias existe un ríspido debate sobre quienes los prepararon por primera vez y la pastelería francesa Ladurée se atribuye la preparación de la versión actual del pastelillo redondo a principios del siglo XX. Sin embargo, Theurel & Thomas seguro pasará a la historia por fusionar los sabores de la cocina mexicana con el clásico postre fránces, algo que ha dado como resultado un exótico y nada despreciable manjar que te hará comerte los dedos.
Si por alguna razón los macarons no son de su agrado, algo que rayaría en la sinrazón, Theurel & Thomas también tiene una selección de dulces productos (malvaviscos de sabores, crema de avellana, mermeladas, chocolates y panes) que dejará satisfecho a cualquier paladar por exigente que sea.
Regalar una cajita de macarons es halagar a la vista y el paladar
Regalar una cajita de macarons es halagar a la vista y el paladar. La estética del postre, el cuidado en el diseño, el empaque y la calidad, de éste y otros productos que Theurel & Thomas ofrece a los amantes de lo dulce hace que valga la pena la visita a su local y que estén pendientes de su llegada a la ciudad de México ya que pronto abrirán una sucursal en la afrancesada colonia Roma.
¿Se les antoja?